Cimentos superficiales

Las cimentaciones superficiales son un tipo de solución de cimentación ampliamente utilizada en edificios pequeños, medianos y en construcciones livianas.

La principal característica de este tipo de cimentación, es que las cargas provenientes de la estructura se transmiten al suelo principalmente por el contacto de la base del elemento de cimentación, por ello también se denominan cimentaciones directas.

El uso de cimentaciones superficiales en obras de ingeniería, siempre debe partir de un análisis cuidadoso. Dichos análisis deben tener en cuenta el tamaño de la obra (cargas solicitadas) y la investigación del terreno. La profundidad no puede ser inferior a 1,5 m, excepto cuando la carga descansa sobre roca.

Para comprender  el concepto de cimentaciones superficiales y cómo funcionan, cuándo elegir si utilizar o no este tipo de cimentación, además de comprender qué tipos de cimentaciones superficiales se utilizan en los distintos proyectos y cómo funciona cada una de ellas, lea este artículo hasta el final.

Elección del tipo de fundación

Hay varios factores que influyen en la elección de un tipo de cimentación. La naturaleza y las características del suelo en el lugar donde se va a realizar la obra, es uno de los factores determinantes.

Pero hay otras variables que también hay que tener en cuenta a la hora de elegir los cimientos ideales para su edificio.

Es importante recordar que las características del suelo, como la resistencia a la compresión, se determinan mediante sondeos, a través de la interpretación del análisis de sus resultados. 

Por lo tanto, a la hora de elegir el tipo de cimentación adecuado para su proyecto, tenga en cuenta la disposición, la magnitud y la naturaleza de las cargas que se van a transferir al suelo; las limitaciones de los tipos de cimentación ya existentes en el mercado local y las restricciones técnicas impuestas a cada tipo de cimentación; los cimientos y las condiciones técnicas de los edificios vecinos y el presupuesto completo necesario para realizar cada tipo de tipología (material, mano de obra, transporte, etc.).

Ventajas y desventajas de los cimientos poco profundos

Debido a que se apoyan a pequeñas profundidades en relación con el nivel del suelo, las cimentaciones superficiales requieren poca excavación y un consumo moderado de hormigón para la ejecución de las piezas, lo que las certifica como excelentes opciones desde el punto de vista económico.

A pesar de su aparente sencillez de ejecución, no hay que descuidar el cuidado en el diseño y la ejecución de estos elementos. Esto se debe a que el hecho de utilizar las capas superficiales del subsuelo para transferir las cargas de construcción hace que las cimentaciones superficiales sean más susceptibles a los cambios en la composición del suelo que las profundas.

Además del bajo coste, otra ventaja de los cimientos poco profundos es que no provocan vibraciones en su proceso ejecutivo.

Sin embargo, las desventajas son inevitables y en el caso de las cimentaciones poco profundas residen principalmente en que requieren un alto consumo de mano de obra, por ser una solución artesanal; en su limitación para cargas muy elevadas y porque presentan dificultades en las excavaciones cercanas a los bordes.

Tipos de cimentaciones superficiales

Los cimientos poco profundos se dividen en:

1. Zapatas Aisladas
2. Zapatas corridas
3. Zapatas combinadas
4. Zapatas extendida
5. Bloque
6. Losa de cimentación
7. Vigas de cimiento

Ingresa a nuestro artículo para profundizar sobre cada uno de estos tipos de cimiento poco profundos.

Las zapatas de los cimientos son elementos de hormigón armado que suelen tener una planta rectangular, cuadrada o trapezoidal.

Están diseñadas para que los esfuerzos de tracción que actúan sobre los cimientos sean resistidos por la armadura y no por el hormigón.

Por otro lado, este tipo de cimentación poco profunda actúa con una capacidad de carga baja o media. Por lo tanto, se recomienda para regiones con suelos estables y buena resistencia en las capas superficiales.

Es decir, algunas de las ventajas de este tipo de cimentación son el bajo coste, la rapidez de ejecución y la posibilidad de construir sin herramientas y equipos especiales.

¿Cuando se utilizan los cimientos superficiales?

Las cimentaciones superficiales o directas se utilizan en suelos firmes, con construcciones de tamaño pequeño o mediano. Pero hay que tener en cuenta que todo esto puede variar en función de la carga del edificio.